Propósitos para 2024: Ir al gym, ahorrar y, ¿para cuándo implantar la RSE en tu empresa?

Con el comienzo del nuevo año la mayoría de personas tiende a fijarse unos objetivos para dar un cambio a su vida y mejorar su bienestar emocional y físico. Pero y si este año además de proponerte hacer más deporte, comer sano o ahorrar, ¿empiezas a replantearte la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) en tu empresa?

Cada vez es más necesaria la atención sobre la emergencia relativa al medio ambiente, la salud y bienestar humano y el progreso económico, debido a los desafíos globales que se derivan de ellas. De hecho, la década actual se representa como una última oportunidad para corregir nuestro rumbo. Es por ello, que ahora más que nunca es vital comprender la importancia y urgencia de la implicación de las empresas en el desarrollo sostenible, ya que es uno de los agentes sociales con más influencia. Además, el hecho de que las entidades se involucren en sostenibilidad no solo beneficia a la sociedad por su impacto social, económico y ambiental, sino que es una oportunidad de crecimiento para la empresa a través de la implantación de la RSE. 

De hecho, según el Pacto Mundial de la ONU, el 2024 se presenta como un año crucial para la sostenibilidad empresarial. “En el año 2024 las empresas no solo han de responder a las crecientes expectativas sociales y normativas, sino que también se tienen que posicionar como líderes proactivos en la creación de un futuro sostenible y ético.”, Cristina Sánchez, CEO del Pacto Mundial de la ONU España. 

Desde Hazlosostenible.org hemos desarrollado diferentes planes especialmente para PYMES, muy asequibles económicamente y de un gran valor añadido, que te permitirán obtener, entre otros beneficios, el fortalecer la atracción y retención de talento, compartir iniciativas y mejores prácticas con otras empresas, y llevar a cabo una acción social de impacto que te ayudará en la camino hacia la sostenibilidad. 

Impulsar el plan estratégico para tu empresa basado en la sostenibilidad e integrar las cuestiones ESG en las estrategias corporativas, no sólo supone una oportunidad para responder a los desafíos globales, sino que también permite afrontar con éxito una creciente regulación en la materia y garantizar la transformación integral de la organización. Aunque, no quiere decir que implantar la RSE en tu empresa sea sencillo, es un reto complicado que requiere un gran esfuerzo pero que reporta enormes beneficios a su vez. 
A la hora de diseñar la agenda ESG e implementar la RSE en tu empresa debes tener en cuenta las 12 tendencias fundamentales que marcarán la sostenibilidad empresarial para el 2024, según el Pacto Mundial de la ONU y Transcendent, consultora estratégica de sostenibilidad e impacto.

1. La incertidumbre del sector

El entorno seguirá presentando una complejidad sin precedentes en 2024, marcado por la incertidumbre y problemáticas poliédricas tales como posibles crisis energéticas, inflación y cambios tecnológicos acelerados. En este contexto, las empresas deberán ir más allá de la búsqueda de rentabilidad y adoptar prácticas éticas y con un impacto positivo en el medioambiente, la sociedad y la economía.

2. La colaboración pública y privada

El sector privado tiene un papel relevante para contribuir a alcanzar ecosistemas económicos y sociales propicios a la sostenibilidad y al desarrollo sostenible. Por esto, las empresas deberán ser proactivas en la colaboración público-privada que favorezca los avances en la materia. El sector privado debe asumir su papel como actor clave en la construcción de mercados y economías resilientes que respalden el desarrollo sostenible e impulsen los derechos humanos.

3. La fijación de objetivos cuantificables para avanzar

Aunque el llamamiento a la acción no es nuevo, sí lo es el programa empresarial del impacto sobre la Agenda 2030: Forward Faster. Cinco líneas catalizadoras de la acción empresarial a favor del desarrollo sostenible para las temáticas donde la acción colectiva empresarial tiene un mayor potencial. En concreto: igualdad de género, resiliencia hídrica, acción climática, salario digno y financiación e inversión sostenible.

4. La transformación del sistema financiero 

En un mundo que busca soluciones sostenibles, las finanzas e inversiones comprometidas con los ODS son la clave para un futuro económico y ambientalmente sostenible. Para impulsar esta transición, el Pacto Mundial de la ONU ha lanzado, dentro del programa Forward Faster, la línea “Finanzas e inversión”. Invertir en la alineación de estrategias financieras con los Objetivos de Desarrollo Sostenible es más que una responsabilidad; es una oportunidad estratégica para las empresas.

5. La extensión de la sostenibilidad en toda la cadena de valor 

No es una tendencia nueva, pero 2024 será un año definitivo para su impulso.  Progresos en la sostenibilidad empresarial, gestión de riesgos ante la interrupción de suministros, madurez en algunos sectores y en medianas empresas, han favorecido el caldo de cultivo perfecto para hacer de la gestión de la cadena de valor un asunto prioritario.

6. El principio del fin del Greenwashing

La aprobación en el Parlamento Europeo de la ‘Green Claims Directive’, que está prevista durante el primer trimestre de 2024, va a ser un hito clave en el marco de la lucha contra la práctica del Greenwashing. Una normativa que se verá también reforzada por el Reglamento sobre Ecodiseño de Productos Sostenibles, que pretende ser aprobado por la Comisión durante ese mismo período de 2024, incorporando requisitos de diseño ecológico a los productos europeos con el fin de mejorar su sostenibilidad ambiental. 

7. La sostenibilidad como un nuevo skill crítico

El compromiso creciente de las empresas con la sostenibilidad ha desencadenado una revolución en el mercado laboral. Estamos presenciando un auge significativo en la demanda de profesionales especializados en áreas de sostenibilidad. Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), se van a crear 24 millones de nuevos “empleos verdes” para el año 2030.

8. No más objetivos para 2050: de la grandilocuencia a la concreción

En los próximos meses, las empresas tendrán que rendir cuentas de los objetivos sociales y medioambientales marcados ante los accionistas, los inversores, los empleados y el propio mercado. Por lo tanto, los ratings y rankings ESG ya no van a valorar objetivos a medio y largo plazo grandilocuentes y el equilibrio entre los objetivos de sostenibilidad y la necesidad de generar valor para los accionistas empezará a marcar las estrategias de sostenibilidad de las empresas.

9. La gran empresa como catalizadora de la sostenibilidad

Las grandes compañías van a liderar el cambio. La Directiva de Diligencia Debida en Sostenibilidad Corporativa (CSDD) va a obligar a las empresas a identificar, prevenir, mitigar, eliminar y reparar los efectos adversos sobre los derechos humanos y el medio ambiente que genere su propia actividad, la de sus filiales y la de su cadena de valor. El efecto arrastre que va a generar la reducción de la huella en toda la cadena de suministro va a ser clave en 2024, ya que supone de media un 75% del total de emisiones.

10. El despegue de la inversión de impacto en España

En 2024 se prevé un despegue de la inversión de impacto en España. El volumen de activos gestionados por la oferta de capital de impacto en España en 2022 ha aumentado un 21% respecto a 2021 y se espera que siga incrementándose en 2024 fomentada por la creación de soluciones financieras que permitan a las empresas acceder a financiación más barata a cambio de generar más impacto. En la misma línea, el Gobierno de España ha creado el Fondo de Impacto Social (FIS), con unos recursos de 400 millones de euros y gestionado por parte del Cofides, para invertir en empresas y proyectos que refuercen el emprendimiento y la economía social en España. 

11. La integración de la sostenibilidad y el impacto en la estrategia de negocio

La integración de la sostenibilidad y el impacto en el negocio de las empresas será clave en 2024 para aquellas empresas que quieran liderar el cambio. Hasta ahora los análisis de materialidad han sido proyectos sin mucho uso. Con la CSRD y la obligatoriedad de hacer análisis de doble materialidad los riesgos y oportunidades emergen a la vista de los directores financieros, los responsables de riesgos, así como a la hora de llevar a cabo ejercicios estratégicos y de planes de negocio. Más de 50.000 empresas europeas estarán obligadas a incluir este análisis en sus estrategias de negocio en los próximos meses.

12. Medir para monetizar el impacto, para empresas que quieren ir más allá

En el ámbito corporativo en España, veremos cómo algunas empresas, para diferenciarse y buscar la generación de un impacto positivo neto, empezarán a incorporar la medición y la gestión del impacto en sus estrategias y en sus informes de reporte. La consolidación de metodologías estandarizadas que permitan a las empresas medir, valorar y monetizar el impacto de las empresas en el medioambiente y la sociedad va a favorecer la medición del impacto y la monetización de las acciones llevadas a cabo por las compañías.

A pesar de que estas tendencias marcarán sin duda el diseño y desarrollo de la RSE en tu empresa, el factor principal que no puede faltar para generar un alto impacto es sentir realmente que quieres colaborar en la construcción por un mundo más sostenible, igualitario, justo y basado en el bienestar social. Si no sabes cómo empezar a integrar los criterios ESG o quieres mejorar tu plan actual, comienza a navegar ya por hazlosostenible.org, el nuevo portal de Fundación Hazloposible para ayudarte a implementar la RSE en tu empresa y crear impacto social y ambiental.

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